Fecha de publicación: 6 de junio de 2017

Sumergirse en la experiencia vivida por cristianos de todo el mundo que mueren o son perseguidos a causa de la fe, preguntándonos qué clase de fe tenemos en nuestras sociedades, en Europa; mostrar a todo el mundo el testimonio de los hermanos en la fe que sufren; y que el visitante de la muestra no quede indiferente ante dichos testimonios con los que sus protagonistas afirman la vida en Cristo por encima, incluso, de la suya propia.

Este es el objetivo de “La belleza del martirio”, la exposición que hasta el 22 de junio acoge la Curia Metropolitana (Plaza Alonso Cano), organizada por Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN) y el Arzobispado de Granada a través de su Centro Cultural Nuevo Inicio.

Nuestro arzobispo Mons. Javier Martínez inauguraba la muestra junto al subdirector de AIN España, Carlos Carazo. En la inauguración, Mons. Martínez subrayaba la necesidad que tenemos de estos testimonios “para encontrarnos a nosotros mismos con la fe que profesamos”. “La vida que el Señor nos da es vida y fuera de ella no es vida”, subrayó. Asimismo, del término “libertad religiosa” que con nuestro modo de entender la vida y las sociedades damos por hecho, nuestro arzobispo recordaba que “no es un concepto que todos los hombres conocen”. “La libertad religiosa es fruto de la cristiandad y llega allí donde se ha extendido la influencia del pensamiento cristiano, o donde la humanidad, confrontada con el hecho de esa experiencia cristiana, ha dejado crecer y ensanchar su corazón hasta dimensiones nuevas”, explicó Mons. Martínez, quien expresó también su alegría por poder acoger en nuestra Diócesis de Granada esta exposición que nos acerca la fortaleza de la fe de cristianos en muchos lugares del mundo perseguidos con riesgo para sus vidas, e incluso algunos de ellos ya mártires.

ESPACIOS DE MARTIRIO RECREADOS
Y es que la exposición acerca algunos de estos testimonios desde África, Libia o países de oriente como China o Corea del Norte. Lo hace distribuidos en cuatro puntos con paneles explicativos y fotografías, incluyendo una novedad: la exposición recrea en cada uno de estos espacios uno de los lugares de martirio de los cristianos. Así, encontramos el modo como quedó un aula de una universidad en Garissa (Kenia) tras el ataque de un grupo armado en abril de 2015; nos acercamos a la playa de Libia donde fueron decapitados 21 coptos por el Daesh por no renunciar a la fe para convertirse al Islam; conocemos las celdas en China para los cristianos fieles al Evangelio; o un altar como en el que encontró la muerte el francés padre Jacques Hamel mientras celebraba Misa en una iglesia en Normandía.

De la mano de esta exposición conocemos el testimonio de cristianos como Rebeca, nigeriana de 24 años que estuvo dos años secuestrada por el grupo terrorista en aquel país Boko Aram; a Christine Anyango, superviviente en el atentado en una universidad en Garissa; o el obispo chino Mons. John Han, de la diócesis de Yongnian (Habei), que murió de cáncer a los 68 años, encarcelado y tras pasar 35 años entre rejas por fidelidad a Cristo. Y junto a ellos el padre Hamel, asesinado durante la celebración de la Eucaristía, o los 21 cristianos de Egipto que llegaron a Libia en busca de trabajo y fueron secuestrados y asesinados por el Daesh, por afirmar a Cristo y no convertirse al Islam. En todos estos testimonios, el motivo por el que vale la pena dar la vida sin renunciar a la fe y el mensaje de esperanza sobrevuela en todo el recorrido, incluido el de quienes han sufrido estas pérdidas y no guardan en su corazón rencor ni odio, como las madres o viudas de los cristianos coptos asesinados en Libia, que dan gracias a Dios porque estos murieron afirmando el nombre de Dios por encima de su propia vida.

“MOTOR DE LA IGLESIA”
El subdirector de AIN España, Carlos Carazo, habló del “motor de la Iglesia” que son estos testimonios “que nos enseña mucho” y nos interpela –explicó- a preguntarnos la clase de fe que tenemos en Occidente, donde vivimos una fe “cómoda”. “Queremos que se sumerjan en esa experiencia”. En este sentido, apeló a la empatía para comprender la fe de la que viven estas personas, animando, por ejemplo, a los asistentes a pensar en qué harían si fuesen ellos quienes se encontrasen en una playa de Libia donde decapitaron a 21 coptos y cuál sería nuestra reacción. “Que nos pongamos en el pellejo de estos cristianos y dejemos escuchar nuestra conciencia, lo que ellos nos enseñan”, señaló Carazo.

Además, la muestra no se concibe como un reconocimiento heroico o un recuerdo por estos cristianos perseguidos, discriminados o martirizados, sino un testimonio que alcance a toda persona que a ella se acerque, le mueva y le conmueva. “Queremos que las personas que pasen por aquí se lleven algo que diga ‘merece la pena la fe’ y nos cuestionemos todos y nos planteemos cómo vivimos nuestra fe hoy”, señaló el subdirector de AIN España en la inauguración.

ORACIONES
La visita guiada concluyó con una oración en el stand que reproduce el altar donde fue asesinado por radicales islámicos el sacerdote francés Jacques Hamel y ante el icono de Nuestra Señora de Fátima, a la que se consagró hace 50 años Ayuda a la Iglesia Necesitada, y la bendición final de Mons. Martínez a los asistentes.

Asimismo, desde la Fundación se invitó a los asistentes a rezar por los cristianos perseguidos y mártires en la fe, que es también la solicitud que más demandan estos hermanos que sufren. Este ofrecimiento de oración de cada uno por los cristianos perseguidos serán llevadas al santuario de Fátima el próximo mes de septiembre, donde peregrinará Ayuda a la Iglesia Necesitada, y a cuyos pies de la Virgen de Fátima depositarán los nombres de las personas que se suman a rezar por esta intención. También invitaron a los asistentes a expandir y dar a conocer la exposición y AIN, y colaborar con su obra quienes estén interesados.

VISITAS GUIADAS
“La belleza del martirio” se propone así como una experiencia personal que ayude a crecer en una fe no dada por supuesto, sino en aquella fe que, no por heroísmo sino por amor, el Señor expresa su fortaleza en situaciones dolorosas y sufrientes. Y los perseguidos a causa de la fe en todo el mundo, discriminados o mártires, que se cifra, según AIN, en 400 millones en todo el mundo, son testigos de Cristo y educan nuestra vida de fe.

La exposición estará hasta el 22 de junio en la Curia Metropolitana (Plaza Alonso Cano), en horario de lunes a viernes de 10 a 14 horas, y de 18 a 20:30 horas, y los sábados y domingos, de 11 a 14 horas. La entrada es gratuita y se realizan visitas que son guiadas por voluntarios granadinos. Además, los visitantes de la Catedral y Capilla Real recibirán con su entrada turística una invitación para visitar gratuitamente esta exposición en la Curia Metropolitana de Granada, primera diócesis que acoge la exposición y que, a partir de ahora, recorrerá el resto de diócesis españolas, tras su presentación el año pasado en la ciudad italiana de Rímini y el pasado mes de abril en Madrid.

Paqui Pallarés