La Misa se convirtió en una animada catequesis entre los niños y el Arzobispo, que les hizo varias preguntas y explicó algunos de los gestos que se llevan a cabo durante la celebración litúrgica.
“Jesús está siempre guardado en esa cajita que se llama sagrario”, empezó D. Javier. “Ese Dios grande se ha hecho pequeñito, en Jesús, para poder estar con nosotros y luego se ha hecho pan para poder venir a nosotros y acompañarnos”.
Los chicos, que ya comenzaron el curso el pasado 10 de septiembre, entregaron durante la ofrenda una cartulina con los nombres de los alumnos y profesores de este centro concertado.
“¡No os preocupéis de que no entendáis cosas!, hay cosas que hay que escucharlas, que van quedando ahí y ya las entenderemos cuando seamos mayores”, les dijo el Arzobispo. “La Misa es para personas mayores, pero el amor no, el amor es para todos. ¿A que todos tenemos necesidad de amor? ¡Y de un amor muy grande! ¿o nos basta con un amor pequeñito? ¡Pues ese es el amor de Jesús!”.
La celebración tuvo lugar en la parroquia de La Caleta, que se encuentra anexa a este colegio concertado adscrito a la fundación San Juan de Ávila. “Fue un momento de encuentro con los niños muy cercano y dinámico, a los niños les gustó mucho”, asegura la directora del centro, Mari Cruz Escudero.
Después de dar la bendición, el Arzobispo visitó el centro que este año celebra sus 50 aniversario como colegio de enseñanza general básica.
Ignacio Álvarez
Secretariado de Medios de Comunicación Social