La Iglesia destina la colecta de la celebración litúrgica de la pasión y muerte del Señor el Viernes Santo al sostenimiento de los Santos Lugares. Es la colecta pontificia promovida desde la Santa Sede, en todas las parroquias, iglesias y templos católicos en todo el mundo en el Viernes Santo.

Ese día, la Capilla Real se unirá a la celebración litúrgica en los Oficios que se celebran en la S.I Catedral. Lo obtenido durante el Viernes Santo con motivo de las visitas culturales se destinará íntegramente a los Santos Lugares.