Fecha de publicación: 3 de enero de 2020

Los miembros de las autoridades entraban en Capilla Real junto al estandarte real poco antes de las 12 de la mañana para recoger la corona de la Reina doña Isabel y la espada de ceremonia del Rey D. Fernando, tomados ambos de manos del Capellán Mayor de la Capilla Real, D. Manuel Reyes.

La espada fue recogido por el teniente general jefe del MADOC, Jerónimo de Gregorio, y la corona de manos de uno de los canónigos de la S.I. Catedral.

Los corporativos y autoridades tanto regionales como municipales y provinciales, además de varios diputados nacionales, no faltaron a esta Eucaristía del día de la Toma que estuvo presidida por el Vicario Territorial, D. Francisco Tejerizo.

EUCARISTÍA, SIGNO DE RECONCILIACIÓN

La lectura de la Misa recordó el pasaje de las Bodas de Canáa. El Vicario General recordó la importancia de la celebración del signo de la fe, que es la Eucaristía, en un día de importancia como el de la Toma de Granada y de la festividad de Santa María, Auxilio de los Cristianos.

D. Francisco Tejerizo recordó la importancia de la fe que supone “un plus de realidad que supera los límites del tiempo y del espacio”. La celebración de la Santa Misa en el Día de la Toma en Granada, al igual que las Bodas de Canáa, supone una apertura a un encuentro, “en un ambiente festivo de donde brota una realidad nueva, que tiene efectos de apertura de acogida, de aprensión, de entendimiento”.

Insistió el Vicario Territorial en cómo ese primer milagro público de Jesucristo era una fuente de novedad que abría en su época una nueva tradición “Se declara una etapa en la que se acaba la purificación judía con agua y empieza una donde la purificación brota del Señor Jesucristo Crucificado y de su sangre derramada que perdona los pecados”.

Por último, recordaba la importancia del gesto de la reconciliación como parte importante en la Eucaristía allí celebrada. “Cada vez que celebramos la Eucaristía tenemos la ocasión de una nueva relación y más en un gesto que la comunidad cristiana repite al ‘dar fraternalmente la paz’”, concluyó.

Tras la Eucaristía, la autoridades políticas y militares se dirigieron a una Capilla Real que no tardó en abarrotarse para asistir a la tremolación del estandarte de los Reyes Católicos entre el presbiterio y la tumba de los reyes.

La celebración del acto en la Capilla Real terminó con la tradicional ofrenda en la cripta de los Reyes con la participación del alcalde de la ciudad, Luis Salvador, así como de la Subdelagada del Gobierno en Granada, Inmaculada López y el teniente general del MADOC, acompañados por el Capellán Mayor de Capilla Real y el Vicario Territorial.

Ignacio Álvarez
Secretariado de Medios de Comunicación Social
Arzobispado de Granada