Un grupo numeroso de movimientos familiaristas, o cuyo carisma ilumina de forma especial la familia, acudieron a la convocatoria de la Pastoral Familiar en este día de encuentro-convivencia que tuvo lugar en una sala del ala este de la abadía sacromontana.

Auspiciados por el lema “Todos encajamos por la familia”, acudieron allí fieles pertenecientes a Hogares Nuevos, Movimiento Familiar Cristiano, Equipos de Nuestra Señora, Grupo Ángel, Fe y Vida, Focolares, Encuentros Matrimoniales, Teen Star, representates del COF, Shalom y el movimiento Encuentro y Solidaridad.

El Vicario de la Pastoral Familiar, D. Antonio Luis Martín, decidió animar esta convocatoria como forma también de toma de contacto de los nuevos delegados de la Pastoral Familiar, Dª Soledad Serrano Vera y D. Cesar Antonio Sánchez, con las distintas realidades eclesiales con una vocación especial por la familia.

DEL TRABAJO DEL PASADO, AL CAMINO DEL FUTURO

El encuentro comenzó tomando como punto de partida el Directorio de la Pastoral Familiar de 1996, que es el último documento publicado con validez en la provincia eclesiástica de Granada que orienta a los pastores y fieles para saber cómo abordar las cuestiones fundamentales que atañen a la Pastoral de la Familia.

El Vicario General Moderador de la Curia, D. Francisco Espigares, estuvo presente allí parara encargarse e introducir este documento, como una forma en la que la Iglesia ha ido advirtiendo a lo largo de los últimos años sobre los caminos equivocados, por los cuales la sociedad se iba a hacer daño. “Por eso ahora es un momento en el que hay que agacharse y curar”, como ese hospital de campaña definido por el Papa Francisco.

Se advirtió claramente que en apenas un par de décadas la realidad social ha cambiado radicalmente. “Cuando salió este documento el 90% de los jóvenes se casaba por la Iglesia. Hoy el 80% se casa por lo civil”, apuntó D. Francisco Espigares. Este nuevo contexto de los matrimonios, la situación de las parejas jóvenes, las heridas afectivas, el cambio social de los roles de hijo-padre o la ideología de género son solo algunas cuestiones que obligan a los miembros de esta Pastoral a repensar conjuntamente cómo encarar la labor de esta Pastoral.

D. Francisco Espigares apuntó en varias ocasiones que en la Amoris Laeticia se encuentra la base para poder hacer frente a los retos de la Pastoral Familiar, recordando que su labor no es otra que llevar a cabo un “esfuerzo para devolverle la humanidad a Cristo, devolverle a la Esposa a su Esposo legítimo, que es Jesucristo, que es quien la ama verdaderamente”, aunque el mundo no sea consciente en su búsqueda.

Todos los presentes pudieron participar de la comida juntos y celebrar la Eucaristía por la tarde, dando también un espacio para la presentación de la Pastoral Juvenil, conscientes de que los jóvenes son una clave importante de esta “pastoral de pastorales”, como la definió el Papa Francisco, que es la de la familia en la Iglesia.

Ignacio Álvarez
Secretariado de Medios de Comunicación Social
Arzobispado de Granada