Después de años de formación en el Seminario Mayor San Cecilio, Rubén Ávila y Juan de Dios Prieto fueron ordenados sacerdotes el pasado sábado en una celebración a la que asistieron cientos de fieles y decenas de sacerdotes.
El Arzobispo de Granada, D. Javier Martínez, presidió la celebración y llevó a cabo el rito de la imposición de las manos que confiere la gracia de la ordenación en el ministerio presbiterial.
Al concluir la Eucaristía, los fieles se acercaron a besar las manos de los dos nuevos sacerdotes capaces ahora de hacer presente al Señor en el misterio eucarístico.
Ignacio Álvarez
Secretariado de Medios de Comunicación Social
Arzobispado de Granada