Fecha de publicación: 21 de marzo de 2016

Santísimo Cristo de San Agustín, Tú eres la primera imagen del crucificado en nuestra Semana Santa. Y nos recuerdas, aunque estamos empezando –no es más que lunes-, que tu amor no se detuvo ni siquiera ante la muerte; tu amor por nosotros, pobres criaturas, y que tu muerte nos ha arrancado a nosotros del poder de la muerte, y que tu entrega nos ha incorporado a la vida divina, nos ha entregado tu espíritu y nos ha hecho hijos de Dios.

Te vamos a pedir esta noche, Señor, por todos los que esta noche se enfrentan con la agonía, con la muerte, por todos los que están luchando entre la vida y la muerte en los hospitales, por todos los que están amenazados de muerte en el mundo, de una forma o de otra, sobre todo por aquellos que se sienten abandonados, que se sienten solos, que no tienen nadie que pida por ellos. Acércate a ellos, Señor. Acógelos con tus brazos abiertos del otro lado de esta vida. Y a nosotros concédenos también la gracia de tenerte a Ti en esos momentos, a Ti y a tu Madre.

Padrenuestro que estás en el Cielo,
santificado sea tu nombre.
Venga a nosotros tu Reino.
Hágase tu Voluntad,
en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día.
Perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden
No nos dejes caer en la tentación
y líbranos del mal.
Amén

+ Javier Martínez
Arzobispo de Granada
Lunes Santo, 21 de marzo de 2016
Plaza de las Pasiegas