Venís, Santísimo Cristo del Trabajo y Nuestra Señor de la Luz del Zaidín atrayendo mucha juventud que te sigue.
“Tú, Señor, eres la más hermosa juventud de este mundo”. “Todo lo que tú tocas se vuelve joven, se hace nuevo, se llena de vida”.
Queremos que bendigas a nuestros jóvenes y rejuvenezcas con tu amor a tu Iglesia.
Que no les falte la luz de tu gracia, un trabajo decente, ni el cobijo de la familia y la comunidad cristiana.
Hazlos misioneros frente a otros jóvenes de tu amor que es capaz de llenar la vida de esperanza y alegría.
Que experimenten tu mirada dulce y radiante sobre ellos.
A Tí te lo pedimos, Esposo, que inauguras la fiesta y el banquete eterno de bodas con tu esposa amada, la Iglesia, primicia de la humanidad redimida.
ORACIÓN:
Padre Nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu nombre,
venga a nosotros tu reino,
hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día,
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden,
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.
Amén.
Francisco Javier Espigares
Vicario General
Plaza de las Pasiegas (Granada)
15 de abril de 2019