Fecha de publicación: 17 de junio de 2019

Dentro de los actos de la Pascua de Resurrección, organizada por la Real Hermandad Sacramental de la Virgen de las Angustias y la Parroquia, en la tarde del sábado 8 de junio de 2019 tuvo lugar el rezo del Via Lucis en peregrinación infantil hasta la Iglesia de San Pedro y San Pablo de la Carrera del Darro, al pie del Conjunto Monumental de la Alhambra, acompañando a la imagen del Divino Niño Jesús.

El Via Lucis o “Camino de la Luz” es la rememoración de la vida y resurrección del Señor. El cristiano no se puede quedar sólo en los dolores de la pasión, como manifestó D. Blas en su alocución en el inicio del Vía Lucis, sino que su vida debe estar iluminada por la Resurrección de Jesús, ya que Él es la Vida, y el que da sentido a nuestra existencia.

A las 18:00, puntualmente, dio comienzo el Via Lucis, presidido por D. Blas Gerardo Gordo Jiménez, Párroco de la Basílica, acompañado por el Hermano Mayor de la Hermandad, D. Miguel Luis López-Guadalupe Muñoz y otros miembros de su Junta de Gobierno que colaboraron en las diferentes lecturas que se hicieron durante las ocho estaciones. Dentro de la Basílica de la Virgen se rezó la primera estación y las demás se fueron rezando a lo largo del itinerario.

La procesión se desarrolló por las siguientes calles, saliendo desde la Basílica de la Virgen: Carrera de la Virgen, Plaza de Bibataubín, Plaza Mariana, calle San Matías, calle Monjas del Carmen, Calle Ánimas, Cuesta Gomérez, Plaza Nueva y Carrera del Darro hasta la Iglesia de San Pedro y San Pablo, en donde fue recibida por la Junta de Gobierno de la Hermandad. El regreso se hizo pasando por Reyes Católicos, Calle la Colcha y siguiendo el itinerario de la ida hasta la Basílica.

La imagen del Divino Niño Jesús, en unas andas primorosamente decoradas con flores, fue transportada por los acólitos de la Real Hermandad, con su alegre y llamativa vestimenta, diseñada por el Prefecto de Protocolo y Ceremonias, D. José María Mingorance Vélez. También ayudaron varios hermanos ya que para los niños suponía bastante esfuerzo, dada las corta edad de muchos de ellos. La procesión fue acompañada por numerosas personas, que con su comportamiento y sus cantos, que fueron entonados por un grupo de personas pertenecientes a la Coral Virgen de las Angustias, le dieron un aire muy espiritual e hizo que todas las personas que la contemplaban, se viesen gratamente sorprendidas por este cortejo procesional.

A las 21:30 terminó este Acto en la Basílica con el rezo de la última Estación del Vía Lucis.

Antonio Mezcua