Fecha de publicación: 7 de octubre de 2019

Un año más, con ánimo fraterno y espíritu pastoral, el clero diocesano granadino se ha congregado en Salobreña, en el marco de una convivencia de dos días en su inicio de nuevo curso académico 2019-2020. Lo hace “para estar juntos, de una manera que nos ayude a todos, para ser más hermanos unos de otros, mejores amigos unos de otros”, como explicó nuestro arzobispo D. Javier Martínez en sus palabras de bienvenida a los hermanos sacerdotes.

En este encuentro, que se propone como tiempo de convivir juntos y de descanso, D. Javier recordó al clero que el ministerio sacerdotal es el servicio al pueblo de Dios, sin corporativismos, sino con la conciencia de la pertenencia a un único y al mismo cuerpo. “Un pueblo está compuesto por distintos miembros de un mismo cuerpo. Y todos actúan por el bien del propio cuerpo”, explicó D. Javier, en referencia a Cristo y a su cuerpo que es la Iglesia.

Precisamente, el nuevo curso pastoral dirige su mirada al próximo Congreso Nacional de Laicos, que, a propuesta de la Conferencia Episcopal para la Iglesia en España, se celebra en el mes de febrero. La misión y el pueblo de Dios son los dos aspectos sobre los que la Diócesis dirige su dedicación este año, siendo así su lema para este curso pastoral “Iglesia de Granada, un pueblo en misión”, al mismo tiempo que hacemos nuestra en la Diócesis la invitación del Papa Francisco para la conversión misionera. “Sólo acudiendo al centro del Misterio de Cristo y vivirlo con más verdad y humildad es como podemos proponerlo en la vida”, afirmó nuestro arzobispo.

En sus palabras de saludo y bienvenida, Mons. Martínez habló del bien que es para la comunidad de fieles y el pueblo cristiano que los sacerdotes sean amigos, lo que hace a todos crecer en la fe, siendo un bien y una meta también en el ministerio presbiteral. Una amistad elevada a la categoría sacramental, recodando así el pasaje del Evangelio que recoge las palabras de Cristo “Ya no os llamo siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque os he dado a conocer todo lo que he oído de mi Padre”.

PRESBÍTEROS Y LAICOS
La Jornada de inicio de curso sacerdotal continúa así profundizando en dos de los temas que les ayude en su ministerio sacerdotal y a acompañar al Pueblo de Dios, que está llamado a la santidad y que lo componen todos los bautizados.

Por un lado, la Carta del Papa Francisco a los presbíteros con motivo el CLX aniversario de la muerte del Santo Cura de Ars, que expuso el Delegado para el Clero, D. Blas Gordo; y por otro lado, la relación entre presbiterio y laicado en la vida parroquial, con la mirada puesta en el Congreso Nacional de Laicos “Pueblo de Dios en salida”, cuya presentación del tema aborda el Vicario General D. Francisco Javier Espigares.

En el marco de este inicio de curso, tres nuevos sacerdotes llegados a nuestra diócesis se han presentado a sus hermanos de presbiterio. Se trata de un sacerdote procedente de una diócesis de Haití, que está en la parroquia Virgen de Gracia; de un sacerdote que ayuda a su párroco en Almuñécar; y de un sacerdote procedente de Venezuela, cuyo servicio pastoral está realizando en Chauchina, Cijuela y Láchar.

Paqui Pallarés
Directora de Medios de Comunicación Social
Arzobispado de Granada