Fecha de publicación: 13 de junio de 2018

En un ambiente familiar y festivo la Fundación Don Bosco de Granada celebró el pasado domingo, día 10, su I Almuerzo Solidario a beneficio del piso de acogida “Mercedes Berdonés”, destinado a jóvenes mayores de edad extutelados, sin recursos y en riesgo de exclusión social con el objetivo de favorecer su autonomía, emancipación social y formación profesional.

El almuerzo, que lleva por nombre el de la Sierva de Dios “Mamá Margarita”, se celebró en las Comendadoras de Santiago y aglutinó a diferentes grupos de la familia salesiana de Granada que comenzaron el encuentro con una oración y reflexión sobre “Mamá Margarita” conducida por el delegado de la Fundación en Granada, D. Diego Quesada:

“Necesitamos promover sus valores que van desde la contemplación a la misión, con un compromiso sólido por los jóvenes más necesitados. Sin duda Dios se sirvió entre otras personas de esta mujer de fe, discreta, humilde y trabajadora, para acompañar e impulsar a Don Bosco en su opción por los más pobres”, afirmó.

Los fondos recaudados por esta iniciativa irán destinados a los proyectos que la Fundación Don Bosco lleva a cabo en la diócesis como por ejemplo el centro formativo o los programas juveniles de reinserción laboral, tales como “experiencias profesionales para el empleo” o también “Andalucía Orienta”.

TRAS LOS PASOS DE DON BOSCO

Un grupo de cooperadores salesianos de Granada y Málaga han realizado a primeros de este mes una peregrinación tras los pasos de su fundador Don Bosco. Una experiencia de comunión y fraternidad en la que pudieron conocer la ruta que Don Bosco realizo a Barcelona en 1886 invitado por la que hoy es la venerable Dorotea de Chopitea, madre de familia y salesiana cooperadora. Entre las visitas programadas en el itinerario los jóvenes salesianos pudieron visitar localidades como Can Prats- Sarriá, lugar donde se hospedó Don Bosco y que hoy es una capilla que contiene cuadros con escenas representativas de la vida de Don Bosco como su fallecimiento en el Oratorio de Turín, el 31 de enero de 1888.