Fecha de publicación: 8 de octubre de 2019

Cientos de lojeños abarrotaron la Iglesia Mayor de la Encarnación de Loja para asistir a la Santa Misa a las 17:30 horas. Toda la asamblea, conformada por los numerosos miembros de las hermandades y cofradías lojeñas, vestían de traje y mantilla obedeciendo así al llamamiento de la Hermandad.

Oficiada por el Vicario General de Granada, D. Francisco Espigares, la Misa estuvo concelebrada igualmente por los sacerdotes y párrocos de Loja, D. Juan Carlos Moreno y D. Juan Carlos Hidalgo. Presentes se encontraban también el alcalde de Loja, Joaquín Camacho, el capitán de la Guardia Civil y el presidente de la Real Federación.

Con esta celebración se termina la serie de salidas procesionales que el Nazareno de Loja ha llevado a cabo en su paso por distintas parroquias de Loja, concretamente Santa Catalina, San Gabriel y la de la Encarnación, en una particular peregrinación que ha constituido una ocasión única para todos los fieles lojeños de venerar esta imagen centenaria.

FE HUMILDE Y SERVIDORA

“La fe hace crecer lo mejor que hay en nosotros, lo mejor de un pueblo, esa fe que tuvieron aquellos hombres y mujeres, aquellas comunidades que hace 400 años aquí iniciaron esta devoción a nuestro padre Jesús Nazareno”, dijo D. Francisco Espigares, sirviéndose de la parábola del grano de mostaza a que hacía alusión el Evangelio del domingo. “Jesús es quien nos revele al Padre, y es más que un modelo a seguir, ante todo es nuestro Salvador, nuestro Redentor”.

Ante la talla del Nazareno, obra del escultor sevillano Antonio Castillo Lastrucci, el Vicario General de Granada insistió en que el “deber ser” del cristiano pasa por el servicio y amor al prójimo. “Nuestro Padre Jesús Nazareno, siendo Dios no hizo alarde su categoría divina, sino que pasó por uno de tantos, siguiendo la condición de esclavo”, dijo inspirado por la imagen del Nazareno de Loja. “Esa es la finalidad del cristiano, ser siervo, esta es la espiritualidad profunda que nace de esta devoción al Santísimo Cristo Nazareno”.

DESPEDIDA DEL HERMANO MAYOR

Antes de la salida procesional, el Hermano Mayor de Nuestro Padre Jesús Nazareno, José Manuel Ramos, dirigió unas palabras a la asamblea reunida en la Iglesia Mayor, por última después de este último mes de procesión del Nazareno, para agradecer “todo el amor y devoción que han superado toda expectativa” de los lojeños durante los últimos 12 de su cargo al frente de la Hermandad. “Disfrutemos de Jesús en la calle de nuestra ciudad”.

El itinerario siguió el mismo camino marcado que la imagen hace el día de Viernes Santo, en esta ocasión de manera extraordinaria por motivo del cuarto centenario de la Hermandad. Un recorrido en dirección hacia la Plaza Constitución, hacia Carrera San Agustín, Plaza de la Victoria, Avenida de los Ángeles, calle de las Mercedes, Avenida de los Ángeles, Plaza Victoria, de nuevo por Carrera de San Agustín, Duque de Valencia y calle Real, antes de su encierro de vuelta en su ermita del Mesón de Arroyo.

Ignacio Álvarez
Secretariado de Medios de Comunicación Social
Arzobispado de Granada