Con espíritu fraterno y de comunión, los sacerdotes diocesanos se congregaban recientemente en su apertura de curso, en la que compartieron su experiencia pastoral y personal de estos meses vividos de pandemia. Con las medidas sanitarias existentes y en representación del resto de sacerdotes diocesanos, el presbiterio participante intercambió un diálogo sobre lo vivido estos meses de pandemia, que está llevando a la Iglesia diocesana a un redescubrimiento “en la relación con el Señor” y al crecimiento en la fe, con la confianza puesta en Dios.
Mons. Martínez, que daba gracias a Dios por los sacerdotes, también dirigía palabras sobre el pueblo cristiano y la belleza de su testimonio, que ofrecen en estos momentos de especial dificultad.
Precisamente, la dificultad del confinamiento ha permitido paradójicamente estar más cerca de Dios y llevar a todos al Señor. También, desde las parroquias, y sin pueblo cristiano presencial a causa del confinamiento, se ha desarrollado el impulso evangelizador a través de las redes sociales, llevando en primer lugar la Santa Misa por conexiones digitales.
También se ha conocido iniciativas de algunas parroquias, como San Juan María Vianney, que ha puesto en marcha “Familias solidarias”, una ayuda a otras familias que tienen dificultades económicas a causa de la pandemia. Están dirigidas especialmente a familias latinoamericanas, que constituyen una notable presencia de pueblo cristiano en esta parroquia.
RETOS PASTORALES
La actual situación de pandemia generó asimismo un diálogo sobre el nuevo paradigma que vive el mundo con motivo de esta crisis sanitaria mundial.
Este nuevo escenario afecta a la fe, convirtiendo en retos pastorales la evangelización y transmisión de la fe en nuestra diócesis y en la Iglesia universal, así como el crecimiento en la conciencia de ser un único cuerpo en Cristo que es la Iglesia. Entre otras conclusiones, se subrayó el redescubrimiento de la gracia de Dios en la vida cotidiana, tanto en el seno de los matrimonios como en las familias, y en definitiva en todo el pueblo de Dios.
En este contexto y con el deseo de ofrecer una luz en la situación actual que vivimos, el Vicario General D. Francisco Javier Espigares recorrió el Magisterio del Papa Francisco a través de sus escritos y documentos principales en estos años de pontificado.
Desde el kerigma hasta cuestiones actuales como el progreso científico, técnico, en medios de comunicación, la pobreza que sufre una parte del mundo pese a ser países con recursos ricos saqueados por multinacionales, el cuidado de la tierra, etc se abordaron en pinceladas el magisterio pontificio de Francisco sobre el mundo actual. Algunos de estos destacados documentos son la Exhortación “Evangelium Gaudium” sobre el anuncio del Evangelio en el mundo actual; el Documento sobre la fraternidad humana por la paz mundial y la convivencia común, firmada conjuntamente con el Gran Imán de Al-Azhar; la Encíclica “Laudato Si’” sobre el cuidado de la casa común; y la Exhortación Apostólica sobre el amor en la familia “Amoris Laetitia”. Junto a ellos también se aludió a otras palabras y escritos del Santo Padre que iluminan la situación actual, agravada por la crisis del coronavirus y la incertidumbre de esta pandemia, entre ellos la última Encíclica del Papa llamada “Fratelli tutti”, que acaba de publicarse y firmada en Asís.
Paqui Pallarés
Delegada de Medios de Comunicación Social
Arzobispado de Granada